274 millones de dólares, esta es la cantidad que México gastó en la compra de antirretrovirales en el periodo 2017-2019. El tratamiento para las 179.640 personas que viven con el Virus de Inmunodeficiencia Humano es caro, México es el país que compra peor, de los seis analizados para este proyecto.

Si antes de la Covid, la cobertura de ARV ya era deficiente, la Emergencia Sanitaria ha colapsado el abastecimiento federal. Los traficantes de medicamentos están ofertando cápsulas de uso exclusivo del Sector Salud a plena luz del día en los mercados ilegales.

En México, el 96% de los medicamentos fueron adquiridos por la modalidad de adjudicación directa según las 9,659 compras analizados que incluyen las de ARV realizadas por Secretaria Salud, IMSS, ISSSTE, SEDENA, Marina y las 32 delegaciones de CENSIDA.

Durante esos años México no realizó ninguna compra a través de un organismo de compras internacional como la OPS o el Fondo Estratégico. Los dos fenómenos sumados provocan que el país tenga un sobrecosto promedio de un 73% respecto a los precios de referencia de la OPS y MSF.

México adquiere 38 tipos distintos de medicamentos antirretrovirales, 28 de ellos, también fueron comprados por los otros cinco países analizados. En 17 casos, México fue el país que más caro pagó por ellos y con diferencias significativas.

Por ejemplo, la combinación de Emtricitabina, Efavirenz y Tenofovir se compra 10 veces más caro que en Guatemala. En total se gastaron 92 millones de dólares cuando pudo haberse adquirido por menos de 9 millones de USD.

El principal proveedor de estos medicamentos es Farmacéuticos Maypo, con ventas con un valor de 175 millones de dólares le sigue Grupo Farmacos Especializados con 52 millones, entre ambas organizaciones controlan el 83% de las compras de ARV del Estado. Ambas farmacéuticas han sido señaladas por el actual presidente López Obrador por presuntos actos de corrupción y tráfico de influencias.

México debe cambiar de forma urgente su forma de compra y distribución de medicamentos para garantizar el Derecho a la Salud de sus habitantes. La intención de esta administración de comprar a través de la OMS y la OPS podría ser un buen primer paso.

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